martes, 21 de diciembre de 2010

No esperes

A veces la vida te da patadas donde más te duele. Te lo merezcas o no. Simplemente te ha tocado. Sólo hay que asumir la situación y saber afrontarlo. Seguir adelante siempre con una sonrisa aunque en tu interior sólo te apetezca morirte, te sientas la persona más desdichada del mundo y creas que ya nunca nada volverá a hacerte feliz.
Todo pasa. Hablo por experiencia.
Te haces más fuerte. Y la perspectiva de la vida cambia. Cambian tus prioridades. O no.
Pero aún así, recuerda siempre que la vida es esta, la que tenemos, sin vuelta atrás y que cada día se nos va escapando entre los dedos así que vívela. Aprovecha cada instante pensando que es el último. Por malo que sea lo que te haya pasado siempre hay razones para seguir adelante.
Así que espabila y no esperes a que sea Navidad para ser mejor persona.
No dejes que los malos entendidos estropeen una amistad o una familia.
No vivas de recuerdos pero tampoco sin ellos.
No tengas miedo a decir te quiero hoy porque quizás mañana ya no puedas.






No hay comentarios:

Publicar un comentario